11 May A los pedales, control total
Los pedales del auto son los mandos para controlar el movimiento del vehículo: iniciar la marcha, detenerla, aumentar la velocidad o disminuirla. Si usted sabe utilizarlos correctamente, podrá circular de forma segura y eficiente. Estos son los tres pedales en la conducción de un automóvil con cambio manual:
Acelerador. Regula el paso de carburante a los cilindros para adecuar la potencia del motor. Por tanto, su uso determina el consumo. Y también condiciona el uso de los demás mandos: si se abusa del acelerador, será necesario pisar más veces los otros dos pedales.
Así, para manejar el acelerador con eficacia es necesario saber cuándo y cuánto pisarlo. En ocasiones, su ‘no uso’ también es un uso seguro e inteligente: si levanta un poco el pie del acelerador antes de llegar a curvas, retenciones y semáforos en rojo, reducirá el uso del pedal y el consumo de combustible.
Freno. Permite detener el vehículo, adecuar su velocidad y mantener la distancia de seguridad con otros vehículos. Los expertos en conducción subrayan que el freno debe usarse en su justa medida, sin excesos, con suavidad, aplicando la presión necesaria: adquirir ese ‘tacto’ al pisar el pedal es útil en frenadas importantes y para hacer cómoda la marcha a sus pasajeros. Por otra parte, el pedal de freno es actualmente el más asistido por ayudas electrónicas, que actúan tanto si se usa por exceso como por defecto
Embrague. Acopla y desacopla el motor a la caja de velocidades. Se usa para cambiar de marcha, pisándolo hasta el fondo y soltándolo suave y progresivamente. En el manejo del pedal de embrague también es importante dominar el ‘punto de fricción’ –disco de embrague y volante de inercia conectan y se transmite el movimiento– para controlar el vehículo al iniciar la marcha en pendientes ascendentes pronunciadas, en estacionamientos y realizar una conducción cómoda y suave.
Tomado de Revista DGT